Sophie empieza a tener pequeños percances o "despistes" que empiezan a hacer que pierda el control sobre su vida (citas de trabajo que cambia la fecha sin acordase, perder objetos sin importancia, denunciar la desaparición de su coche cuando estaba aparcado dos calles atrás...). Todo esto en un conjunto empieza a inquietar a Sophie que decide no decirle a su marido nada por miedo a que la tome como a una loca.El antagonista de esta historia no es el subconsciente de Sophie aunque lo parezca, sino que es un hombre llamado Frantz. Un hombre de edad media que lleva la traumática muerte de su madre a las espaldas y que está solo acompañado de su gran fortuna heredada. Frantz como bien describe en el libro, él será la lógica de Sophie. Frantz a causa de un oscuro motivo empieza desde la penunbra a mermar el aguante psicológico de Sophie mediante unos recursos,como los que ya escribí anteriormente, muy sutiles e intrascendentes pero que en sucesión alarman el sentido común de cualquiera, junto con la ayuda de cambiarle sus medicinas por otros fármacos consigue controlar su estado de ánimo.
El plan de Frantz va mucho más allá que un simple fastidio y con su habilidad consigue hacerle creer a Sophie que es una asesina, ya que se encuentra en dos ocasiones cuerpos inertes al lado suya y no recuerda nada. Tras esto Sophie tendrá que empezar una fuga a contrarreloj con la policía y de alguna forma también de su sombra llamada Frantz.
Sophie conocerá a gente muy transcendental y tendrá que mantener esa guerra psicológica al mismo nivel que su contrincante para poder sobrevivir. Sophie deberá ser también una sombra velada.
Con un estilo directo y rápido, Pierre Lemaitre nos desplaza a una mente intranquila, cansada y alerta que nos hará sentir la misma impotencia de no poder controlar la mente de uno mismo. Nos enseñará como la mente te puede jugar una mala pasada y lo que aterra el desconocimiento. Con un gran suspense que nos absorverá a empatizar con Sophie y a odiar a Frantz.
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