
Tras varias visitas a Harry y varias preguntas indiscretas a ciertos habitantes de Aurora,al fin tras varios días de indagar Marcus empieza a visualizar diversas hipótesis. El caso da un giro al ponerse al corriente de que aparte de estar ese verano con Harry, Nola tuvo un amante mayor que ella y que incluso Harry, Elijah Stern un empresario de éxito de cuarenta años.
Nola, era una hija única procedente de una familia evangelista muy conservadora. Con unos padres estrictos, llegando la madre a ponerle la mano encima varias veces, y una mente inquieta por vivir, Nola no se sentía libre, no era feliz al lado de su familia. Una niña con aspecto angelical con demonios interiores que le negaban vivir. Con esta biografía, se sobreentiende que Nola buscaba ese hombre con la madurez y el poder adquisitivo como para poder librarla de esa cárcel invisible que no le dejaba respirar.
Durante varios días Harry disfrutó, siempre de forma inocente nunca propasándose, de la compañía a escondidas de Nola pareciéndole ésta un ser extraordinario aunque imposible por la diferencia de edad, y tras una guerra mental decide lo más correcto: alejarse de esa niña. A Nola esto le causa un gran disgusto llegando al punto de intentar suicidarse ya que sin Harry nada tenia sentido. Y él, tras sentir que podría perder a Nola para siempre decidió no separarse de ella nunca más, visitándola a escondidas y dejando cartas bajo la almohada.
Dentro de este caso giran varios nombres a tener en cuenta: Tamara Quinn, dueña del dinner Clark's que encontró una nota de Harry hablando de Nola llegando a la conclusión de que era un depravado. El jefe de policía Pratt, ya que a pesar de ser avisado por la señora Quinn de las informaciones que tenía sobre Harry, después de la desaparición de Nola ni se molestó en interrogar a Harry ¿Porque?. Elijah Stern, rico empresario que mantenía una especie de relación con Nola y aquí podríamos meter tambien a Luther Caleb, un hombre deforme que era el chófer que iba a recoger a Nola al pueblo hasta Concord a la mansión de Elijah, a pesar de negar conocer a Nola, en la mansión de éste se encuentra un cuadro de Nola pintado por un tal "L.C.". Harry, que es el principal sospechoso ya que todas las pruebas como flechas de neón le señalan como asesino: mismo coche que el fugado, despedida escrita en el manuscrito, cuerpo encontrado en su casa... pruebas tan claras como que el sol saldrá mañana, aunque Marcus intentará indagar con ese poco margen que deja la obviedad o la claridad de los hechos aunque contra más se mete en el caso, contra más gente le habla más confuso y borroso se vuelve todo, creándose más preguntas que respuestas.
A partir de estas pesquisas o interrogantes anteriores se empieza a desglosar el caso. Poco a poco Marcus junto con el agente Galahowood empiezan a encajar pistas y a descubrir respuestas ya que nada es lo que parece en el pueblo de Aurora donde parece que todo el mundo tiene algo que ocultar.
Con un final inesperado Jöel Dicker nos sorprende sintiendo como la injusticia del caso de uno propio.
- Sin desvelar el final este libro te muestra que todo, incluso la locura, tiene una explicación. Siempre tenemos nuestras propias excusas o razones para hacer acciones injustas, ya que la justicia es tan relativa que sólo es justa cuando nos libra de culpa. La supervivencia del ser humano por buscarse lo más oportuno para uno mismo puede tener la repercusión de hundir a otros y algunas personas están dispuestos a pagar ese precio. El egoísmo puede convertirse en un gran monstruo que arrasa con todo.
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